Carta a la Profesora

Querida Profesora Leticia:
Han pasado 6 meses desde que usted y yo nos vinculamos en esta asignatura, que al principio, y sólo con el nombre, pensaba que sería teoría tras teoría y que de memoria me debía aprender todas y cada una de ellas. Estoy feliz de haberme equivocado, pues como usted ha dicho: “Un examen no me sirve para medir cuánto saben, sino la puesta en práctica de esos conocimientos.” Y que finalmente eso fue lo que más enseñanza me dejó.

Cada una de las actividades realizadas me hizo comprender, a manera de integración personal, cada teoría sin necesidad de chutarme de memoria todo el libro.

Desde la visita al Jardín Etnobotánico, la exposición de la Teoría de Montessori a través de materiales que comúnmente se utilizan en preescolar pero que nos hizo ser niños de nuevo dentro de estos altos niveles en los que ahora estamos, la sistematización de nuestra información a través de diapositivas hasta la intervención en las escuelas, pude apreciar el verdadero sentido de formarse para lograr formar.

Entre risas, estrés, presión, problemas personales, problemas económicos y las ganas de querer salir vencedores, logramos (la gran mayoría) cumplir con esta tarea.
Cada uno de nosotros se lleva lo que desde el principio quiso llevarse; yo en mi mochila me llevo mis notas de lo comentado en clases, mis investigaciones, mis dibujos que me ilustraban toda la teoría, mis trabajos en equipo, y la grata experiencia de haber realmente aprendido y no sólo por cumplir con una calificación.

Espero sea ésta una forma original de crear una pauta en este blog. Gracias Profesora, seguimos en contacto. Hasta pronto.

Atte.
Lirio I. Castillo López